
martes, 29 de noviembre de 2011
Capulina y el Circo

martes, 22 de noviembre de 2011
Aguja en un pajar
Solías decir que todos son puras pajas, que vos sos el único derecho, la aguja en el pajar. Yo me reía de vos, de tu prepontencia. Quesi un día que me mirabas y me sonreías, sentí algo punzante en el corazón y comprendí que, sin querer, te me habías metido dentro. Pensé que dándome la oportunidad de quererte me dejarías de doler, quesi entre paja y paja, pajero, te volviste a desaparecer..
jueves, 17 de noviembre de 2011
Miseria
Quiero verte desnuda me escribía a diario con la urgencia impaciente del amante en celo. Quise jugar al trueque y le prometí que le entregaría la imagen de mi cuerpo el día que me ofreciera un poema que me lamiera el alma. No me contestó. No sabía hacer el amor con palabras.
Qué miseria de poeta escribí y cerré el chat.
Qué miseria de poeta escribí y cerré el chat.
martes, 15 de noviembre de 2011
Desde el laberinto
Cómo será ver el pasado sin recelo.
Cómo será encontrarse en el espejo
y pensar que solo se fueron los años
pero que sigues siendo
exactamente el mismo.
Que no hubo mayores cambios
que te fuiste sin desviarte
porque dirigiste tu vida
porque tuviste siempre el mando
porque nunca nadie
te llevó prisionero
a algún mundo lejano.
La vida ha sido
benévola contigo
te cambió la edad
te cambió la cara
pero dejó al destino
durmiendo satisfecho
sobre la palma de tus manos.
Qué envidia verte
tan amigo del tiempo,
arrullando a la suerte
y siendo el paradigma
de Cohello y Og Mandino.
Yo te veo,
te observo,
triste,
y me pregunto
cómo habría sido la vida
detrás de las paredes invisibles
de este laberinto.
Cómo será encontrarse en el espejo
y pensar que solo se fueron los años
pero que sigues siendo
exactamente el mismo.
Que no hubo mayores cambios
que te fuiste sin desviarte
porque dirigiste tu vida
porque tuviste siempre el mando
porque nunca nadie
te llevó prisionero
a algún mundo lejano.
La vida ha sido
benévola contigo
te cambió la edad
te cambió la cara
pero dejó al destino
durmiendo satisfecho
sobre la palma de tus manos.
Qué envidia verte
tan amigo del tiempo,
arrullando a la suerte
y siendo el paradigma
de Cohello y Og Mandino.
Yo te veo,
te observo,
triste,
y me pregunto
cómo habría sido la vida
detrás de las paredes invisibles
de este laberinto.
martes, 8 de noviembre de 2011
La Reunión
- A mí me enterraron ayer - dijo uno. El salón los había visto llegar en solitario y los había reunido en su centro casi sin querer. Habían salido del mismo país para llegar a la misma ciudad. Y lo pasado, claro, también los unía el pasado. Sin embago, en la calle, es decir, en la vida que en ese momento pasaba viéndolos desde afuera, apenas si se habrían saludado. Sufrían de una especie de embriaguez por el ambiente, la exposición, las fotos, y los recuerdos que se amontonaban para salir en medio de la tristeza y la nostalgia. Se conocían desde hace tiempo, de lejos, de entonces, pero era la primera vez que le dejaban espacio a las preguntas, por lo menos a aquéllas que sí tenían respuesta: cuál centro de detención, cuánto tiempo había pasado, cada uno, en uno de esos espacios sin espacio en los que el tiempo se estira en la soledad y el dolor, cómo habían logrado salir de un país que parecía no tener salida: a mí me pidieron desde acá / a mí me llevaron directo a la embajada / a mi me sacó un militar que le picó la consciencia. Habían llegado en fechas distintas, tenían historias distintas que nos se contaban, pero que, intuían desde sus propias historias. Todos conocían muy bien la muralla de pudor que marcaba la frontera de lo inpronunciable. La mayoría habían venido solos. Los demás se quedaron, ché, se quedó mi hermano/mi amigo/mi padre/ nunca supimos Las fotos retrataban memorias de ausencias, y en las memorias las ausencias se llenaban de recuerdos. - A mí me enterraron ayer, hermano - volvió a decir el uno - venía en la prensa, estaba mi nombre completito. Encontraron una fosa y alguien me identificó, no sé quién y no se cómo. Me declararon muerto. No reclamé. No me importa. Los que quiero, saben que estoy vivo. Siempre lo supieron. - A los recuerdos que llegaron de último, las lágrimas contenidas les quitaron la voz.
martes, 1 de noviembre de 2011
Gráfica Escrita
Gracias a Luis Pinto salió hoy una publicación que combina la gráfica con la literatura. A partir de una convocatoria, escritores y artistas unieron esfuerzos para crear esta publicación. Mi texto - Minimalismo - fue interpretado genialmente por Diego Díaz . Aquí les dejo la publicación. :)
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