Como cuando vas de pie en el metro, y vas shuteando lo que ve en su celular el señor que va sentado de espaldas a ti , y ves que recibe un whastapp con la foto/selfie de un muchacho que obviamente acaba de salir de la ducha, sin toalla, y ves que el señor le escribe/pregunta si se la acaba de tomar, y el de la ducha responde que sí, y el señor le escribe "guauuu", y tú quisieras enterarte de qué onda, si están empezando una relación o son ya pareja, si es la primera vez que el joven señor ve sin toalla al de la ducha, o si de veras está seguro que el de la foto es el mismo que la persona con la que está whatsappeando, pero en eso llegas a la parada donde debes bajarte, y no hay chance de seguir shuteando porque el joven señor se baja, y además el amigo con el que va ya te echó color de que estabas viendo conversaciones y fotos de hombres ajenos y sin toalla, y no te queda más que bajarte del metro con la historia inconclusa, y escribirlo más tarde en este post.
Cuentiemos
memoria virtual para mis ideas y cuentos, y aquellos textos que me impresionan
domingo, 29 de abril de 2018
viernes, 15 de septiembre de 2017
sábado, 1 de julio de 2017
Cuentos para Adultos Fantásticos
disponible en Guatemala
Librería
Casa del Libro
5a. calle 5-18 zona 1
Interior Casa de Cervantes
Tel. 22321785
librosdelacasa@gmail.com
chitopacheco@hotmail.com
www.librosdelblog.blogspot.com
Editado por Editorial Alambique
domingo, 4 de junio de 2017
Cuestión de ternura
(a propósito de las Jornadas a la Memoria de Luis de Lión)
La hecatombe significó
el final de los tiempos.
La mía, por supuesto.
Ustedes me sobrevivieron.
Debían trascender la oscuridad
para buscar la esperanza.
Ellos, los del rostro oculto,
quisieron quemar la palabra
eliminado el poema
y triturando los sueños.
Dejé escondida mi ternura
en las manos de la madre
del padre que llora
de las compañeras de las jóvenes
que jugaron a esconderse
de la maldad de los hombres.
La misma guadaña que segó mis utopías
insiste en cegar las visiones
y acallar las voces
de los que me sobrevivieron.
La hoguera no era para las niñas,
ni para los libros,
ni para los sueños.
El fuego debía surgir del corazón del hombre
de la tierra fértil
del color rojo de las flores y su olor a rocío;
de la pasión del Volcán de Fuego
y de la opulencia del Volcán de Agua.
El fuego debía ser calor humano
antorcha
guía
calor de hogar.
Y no combustión de sueños
y deseos de libertad.
¿Qué harán ahora ustedes
los que me sobreviven?
¿A dónde irán con mi memoria?
Sé que acontece la ternura
cuando dos o más recuerdan mi nombre
y descubren el rostro que nombran mis palabras.
Ese es mi legado.
El olvido es la peor de las injusticias.
Hay que encontrar el camino de retorno
a la esperanza
y que nadie más
ni el pájaro más frágil
deba morir al querer volar.
La hecatombe significó
el final de los tiempos.
La mía, por supuesto.
Ustedes me sobrevivieron.
Debían trascender la oscuridad
para buscar la esperanza.
Ellos, los del rostro oculto,
quisieron quemar la palabra
eliminado el poema
y triturando los sueños.
Dejé escondida mi ternura
en las manos de la madre
del padre que llora
de las compañeras de las jóvenes
que jugaron a esconderse
de la maldad de los hombres.
La misma guadaña que segó mis utopías
insiste en cegar las visiones
y acallar las voces
de los que me sobrevivieron.
La hoguera no era para las niñas,
ni para los libros,
ni para los sueños.
El fuego debía surgir del corazón del hombre
de la tierra fértil
del color rojo de las flores y su olor a rocío;
de la pasión del Volcán de Fuego
y de la opulencia del Volcán de Agua.
El fuego debía ser calor humano
antorcha
guía
calor de hogar.
Y no combustión de sueños
y deseos de libertad.
¿Qué harán ahora ustedes
los que me sobreviven?
¿A dónde irán con mi memoria?
Sé que acontece la ternura
cuando dos o más recuerdan mi nombre
y descubren el rostro que nombran mis palabras.
Ese es mi legado.
El olvido es la peor de las injusticias.
Hay que encontrar el camino de retorno
a la esperanza
y que nadie más
ni el pájaro más frágil
deba morir al querer volar.
viernes, 3 de marzo de 2017
Desvestir Santos y Otros Tiempos
Mi nuevo libro editado por Alas de Barrilete en conjunto con La Maleta Ilegal
Algunos cuentos en:
www.esquisses.net/2017/02/tania-hernandez/
Reseña de Maya Juracán para Barrancópolis
http://barrancopolis.com/la-rebeldia-de-la-mujer-esta-desnudandose/
El empoderamiento y la emancipación de la feminidad en cada uno de sus personajes hace que este libro me sepa certero, creíble e icónico. Madres, hijas, niñas, prostitutas, mujeres enamoradas, abusadas y violentadas…
La primera vez que vi el libro Desvestir Santos y otros tiempos de Tania Hernández (que tiene en la portada una ilustración de Gustavo León) fui advertida: “dicen que no es suficientemente feminista”. La imagen mostraba a una mujer en el acto de desvestirse, pero no se le veía el rostro.
Saldré de mí para ser lo que soy. Saldremos del nunca para ser lo que somos, fuimos siempre. Perras que ladran rabia, perras que ladran vida. Ustedes, nosotras, ellas. Hasta que los muros que nos niegan empiecen a temblar.
Tania hace uso de una prosa ágil y nos lleva a una posición de reconocimiento femenino. Sus relatos nos sumergen en la sensación de ser mujer. Una parte de construirse como feminista la constituye el reconocimiento de nuestra posición en el mundo, en los personajes del libro que Tania describe de forma sutil y sencilla algunas veces estos son partícipes de ese reconocimiento aunque en otras ocasiones la desventura las hace ajenas de esa luz.
Jugando con la moral religiosa, la autora presenta a unas mujeres que provocan a los dogmas a través de una fuerza satírica dentro de ellas. La moral es una acción impuesta y patriarcal, donde en base a estereotipos se ridiculiza las acciones comunes. Los escenarios en Desvestir Santos y otros tiempos son cotidianos pero no comunes, nos atraviesan en base a fechas específicas un sentir del simbolismo de la conmemoración, se trata de una narrativa visual y poética.
Aunque se habla de violencia, se logra transformar esta en un símbolo de resistencia y sobrevivencia. Como a veces las conversaciones tradicionales se convierten en luchas individuales por conservar la esencia de tu propio yo.
Las historias no se me hicieron ajenas, todas fuimos ellas, cuando las primeras nociones de nuestro género se imponían y por momentos nos embargaba la desolación, Tania logra a través de una sátira subyacente traernos de vuelta la sonrisa, reflexionar sobre lo bello que es aprender a vernos felices.
La sangre atraer a los lobos, a los coyotes y a los depredadores. Eso le dijo su madre la primera vez que sangró. Pero ella aprendió que para no dejar de sangrar no había que cerrar las piernas, sino abrirlas abrirlas mucho para que el lobo mayor entre o para que los lobitos salgan… Ella es una oveja continuamente preñada de lobos.
El empoderamiento y la emancipación de la feminidad en cada uno de sus personajes hace que este libro me sepa certero, creíble e icónico. Madres, hijas, niñas, prostitutas, mujeres enamoradas, abusadas y violentadas, hablan de desvestir el imaginario patriarcal, de evidenciar y provocar. Pero lo dicen sin verse, se reconstruyen sin darse cuenta de lo bello que es estar desnuda, para nosotras mismas.
miércoles, 1 de marzo de 2017
Algunas ideas sobre diversidad y tolerancia
El nivel óptimo de inclusión al que deberíamos intentar llegar es a no ver al “otro” como una desviación de la norma (que soy yo y los míos) que debe tolerarse, ni siquiera como una “irregularidad” del sistema, a quien debe tratarse de forma especial, sino en reconocer que el yo y mi circunstancia son solo una de muchas circunstancias posibles. Es así que yo, como hetero no soy la norma en la que los LGBTII son una desviación, sino que el ser hetero es solo una posible preferencia e identidad entre muchas. El yo ser cristiana no es la única religión posible, en la que yo tolero otras religiones y espiritualidades (que deba considerar erróneas), sino que es solo una forma entre muchas de experimentar lo divino. Yo, en mi mestizaje, soy solo una mezcla posible de todas las millones de mezclas que han habido, hay y habrán sobre la tierra. Yo, con mis capacidades limitadas, necesito de herramientas y apoyos para lograr en conjunto y con los recursos adecuados aquello que sola no puedo lograr, como todos nosotros necesitamos en mayor o menor medida ayuda para ser lo mejor que podemos ser. Yo soy única, tan única como todos mis coterráneos de este planeta tierra. Soy solo una posibilidad entre miles de millones. La única norma posible en este planeta diverso es la diversidad.
martes, 26 de enero de 2016
Liberando los pensamientos negativos
Me
había logrado contener durante casi media hora. Pero cabal en el momento
en el que el instructor nos instaba, con voz de monje tibetano, a que
expulsáramos de nuestra mente todos los odios y pensamientos negativos,
mi gripe se empoderó y me hizo estornudar tan fuerte, que uno de mis
pensamientos más verdes y pegajosos se quedó adherido a la punta de su
nariz. Salí corriendo avergonzada. Antes de salir para siempre de su
clase, lo volteé a ver. Creo que me miraba con odio
Suscribirse a:
Entradas (Atom)